Me han encantado, están buenísimos y en contra de lo que parece no cogen mucho aceite al freírlos. De hecho la bollería en general, hecha en casa y frita, no me resulta para nada que chupe mucho aceite. Unos filetes de pollo empanados chupan bastante mas, al menos esa es mi percepción.
Ingredientes:
- 250 grs de calabaza limpia, sin piel
- 15 grs de levadura fresca
- 3 cucharadas de azúcar
- Harina, la que admita (en torno a 300-400 grs)
Pasado el tiempo, se prepara una sartén con aceite, yo de girasol. Se echa un trocito de cáscara de limón para que no deje olor en la cocina, esto es opcional pero funciona muy bien, y se pone a calentar el aceite. Vamos cogiendo trozos de masa con una cuchara y con las manos mojadas en agua, damos forma al buñuelo haciendo un círculo en el centro. Es fácil y se hace muy bien. Se van friendo a fuego medio, no muy alto que se queman. Se ponen en papel absorbente y una vez fríos se rebozan en azúcar.
En las recetas que he visto no añaden azúcar en la masa pero yo de otras veces que he hecho algún dulce de este tipo siempre me ha parecido que faltaba.